Con los cuales tendrás un trato de amistad verdadera mientras que con otros debes manejar un trato más profesional, sin embargo, existe una tercera opción, una clase de compañeros que extiende sus garras por cualquier nueva mujer que comience a trabajar en la compañía para arrastrarla a sus pies. El famoso y reconocido "seductor de oficina" que no sólo es un personaje ficticio en el mundo cinematográfico, es real y nunca falta.
Estos cazadores de aventuras se han duplicado ahora que el campo laboral está siendo dominado por mujeres generando más casos de mujeres sin saber qué hacer. Entonces ¿qué hacer?
- No ofrezcas confianza sin dejar de ser amable. Es importante considerar que en el trabajo hay muchos puestos jerárquicos, en los cuales se pueden encontrar los seductores de oficina y puede ser tu caso que te toque lidiar con uno que posea un rango mayor al tuyo. Por eso mismo debes ser amable con todos. Trata de no involucrarte demasiado personalmente con tus compañeros.
- Fotografías. El truco más viejo es este, si eres una persona un tanto "seca" sentimentalmente y no acostumbras a tener fotos de tu pareja si es que la tienes pues has un cambio y hazlo, este simple hecho pone una barrera psicológica a toda aquella persona que desee algo contigo.
- No llames la atención. Si eres una mujer atractiva y te gusta lucirlo, vistes prendas que resaltan tu figura y/o mostrando tus fortunas. Los seductores correrán hacia ti. No llames la atención, vístete normal, es trabajo, debes ir cómoda no como si fueras a una fiesta con tus amigas.
- No aceptes regalos. Este es un principal factor de importancia, si te invitan a comer o te llevan regalos de vez en cuando estás creando un lapso de intimidad con el seductor, dándole esperanzas y aumentando su insistencia.
Es importante que si te enfrentas a un seductor de oficina lo hagas de manera profesional, no le dediques importancia, si te insinua algo, manda indirectas u otra cosa que te insinue que quiere algo no le tomes importancia, esto ayudará a que vea que ni siquiera le importas.
Si tu caso es extremo al grado de que sea un jefe o alguien muy superior, si lo detectas a tiempo deja en claro indirectamente que no deseas nada, pero si el problema persiste habla con él y explica que tú no quieres nada, sólo estás ahí para cumplir con tu labor y que no quieres hacer otra clase de trabajos.
Ya si el problema persiste, y tu jefe no capta eso entonces es mejor que busques otro empleo o en otros casos la "demanda por acoso laboral".
Existe otra clase de compañeros con la cual te puedes enfrentar, los enemigos, lee este artículo de cómo lidiar con los enemigos en el trabajo
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