Contacto Visual. Demuestra respeto e interés en lo que la personas te quiere decir, especialmente con personas que acabas de conocer.
Desviar tu mirada del rostro de la otra persona te ayudará a que se sienta más cómodo y te dará tiempo de organizar tus pensamientos.
La postura de tu cuerpo. La espalda debe estar relajada y no debe haber tensión en los músculos. Tu espalda debe mantenerse erecta como si un hilo tirara de ella.
La posición de la cabeza. Cuando quieras sentirte seguro de ti mismo, mantén tu cabeza nivelada, horizontal y verticalmente.
Movimientos de los brazos. En términos generales, cuanto más expresivo seas, más tiendes a mover tus brazos alejándolos de tu cuerpo, cuanto más callado seas, menos gesticulas, y los movimientos son menores.
Las piernas. Tendemos a moverlas más de lo normal, cuando estamos nerviosos, estresados o decepcionados, lo mejor es mantenerlas quietas.
Orientación o ángulo del cuerpo. Esto da una indicación de nuestras actitudes y sentimientos hacia los otros.
Cuando saludas a personas que acabas de conocer, el apretón de manos deberá ser vertical y hacia arriba genera una sensación de igualdad.
Si te acercas a una persona y se aleja es probable que estés muy cerca de su zona de comodidad aléjate un poco para relajar la relación
Los movimientos de la boca. Estos pueden descubrir toda clase de claves de cómo nos sentimos.
Si escuchas el doble de lo que hablas, serás un buen comunicador, que sabe como controlar una conversación balanceada sin ser egoísta.
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